jueves, 19 de diciembre de 2013

¿CÓMO DEBERÍA DE SER UNA RESEÑA?


Si has llegado hasta esta entrada buscando instrucciones precisas sobre cómo realizar una reseña, te sugiero que dejes de leer porque no las vas a encontrar. Puede que haya quienes necesiten una plantilla que seguir a pies juntillas pero yo ni la uso ni la quiero. Tampoco, claro está, pretendo dar instrucciones.

Yo leo reseñas en la red. A veces lo hago para hacerme una idea de lo que voy a encontrar en un libro, otras porque las ha colgado alguien que conozco y quiero ver su opinión.

Como sabéis, también hago reseñas.

O lo que sea.

Las mías son más un cúmulo de sensaciones que un texto que convierta en cadáver a un libro y le haga la correspondiente autopsia. No destripo, valoro siempre desde la subjetividad de mi experiencia lectora y siempre, siempre, siempre, aviso de ello porque quizá una novela que a mí me ha parecido maravillosa, para otro lector puede ser un tostón infumable y, al contrario, una novela que me ha dejado con malísimas sensaciones, a otro le puede parecer la obra del siglo.

Para hacer esto suelo poner la sinopsis y la portada, mencionar a los personajes con un par de rasgos muy generales, perfilo ligeramente la trama interrumpiendo la narración casi en lo más interesante, hablo del punto de vista del narrador y quizá comento la ambientación. Pero desde luego, lo que no hago (y no porque no sepa hacerlo) es diseccionar el libro detalle a detalle porque con eso tal vez puedo demostrar que soy muy buena analizando textos pero no es mi objetivo.

Yo quiero empujar a la lectura, quiero que los demás sepan más o menos qué pueden encontrar y, por supuesto, quiero que desarrollen su propio criterio. Por eso en este blog no hay apenas reseñas negativas porque yo no voy a recomendar un libro que no me haya gustado. En la vida real no lo hacemos, ¿por qué aquí debería ser de otro modo? Yo no tengo compromisos, por eso también soy más libre de hacer lo que me venga en gana.

¿Qué pasa con un libro después de una reseña demasiado minuciosa? ¿Quién querría leerlo cuando no le hayan dejado nada por descubrir? Yo me lo pensaría…

Para mí una buena reseña es aquella que dice sin decir, que cuenta sin contar, que descorre la cortina para mostrarte un mundo pero que no te destroza nada de lo que allí encontrarás.

Hay muy buenos anfitriones en la red.

Y malísimos.

Exactamente igual que sucede con los libros: los hay buenos, regulares e infumables pero esta catalogación sólo debería dársela el lector.