martes, 30 de agosto de 2011

LIBROS A MEDIO LEER

No es frecuente que yo me rinda con un libro, que abandone su lectura por la mitad. Siempre quiero darles a todos la oportunidad de sorprenderme con un final inesperado, con un giro que me convenza de que no me equivoqué al elegirlos. Lamentablemente, no siempre es así. Pruebas de ello son aquel que comenté hace algunas semanas en la entrada razones por las que un libro no me ha gustado nada, del cual he borrado hasta el nombre de mi memoria y Perdona pero quiero casarme contigo, de Federico Moccia. Llegué al final por pura cabezonería pero más me valía haberlos dejado por el camino.


En los últimos años he ido amontonando libros que no he sido capaz de terminar. Algunos se han pasado semanas durmiendo a mi lado, acumulando horas de espera inútiles hasta que decidí buscarles un sitio en las estanterías. Entre los repudiados por mi paciencia están, sin ir más lejos, Un mundo sin fin, de Ken Follet, El asedio, de Pérez-Reverte y La tierra de las cuevas pintadas, de Jean M. Auel. Estos tres tienen en común varias cosas: tienen páginas de más, los esperé con demasiadas expectativas y quizá no elegí bien el momento de lectura. Ahora estoy con Cazadores de sombras, de Cassandra Clare, un libro que me está costando mucho más de lo deseable. Este no tengo intención de abandonarlo, pero se han colado en medio dos libros de Vargas Llosa y cuando esto me pasa se empiezan a encender todas las señales de alarma.
¿Os ha pasado alguna vez? ¿Ha habido algún libro que os ha resultado imposible? No me refiero a los que te mandan leer en clase, sino a los que tú mismo eliges.

11 comentarios:

  1. Precisamente me ha pasado con un autor que nombras: Federico Moccia. Mira que lo he intentado, pero ¡¡no puedo con sus libros!! Otro con el que lo he intentado varias veces es con Tolkien pero se me atraganta, no sé por qué ...
    Ha habido varios libros más por ahí que no he podido con ellos pero ahora mismo no me acuerdo ni de los títulos :P

    ResponderEliminar
  2. Yo abando muy pocos pero que me vengan ahora a la mente por ejemplo El conde de Montecristo o El péndulo de Foucault
    un beso!

    ResponderEliminar
  3. Samira: he leído varios libros de Moccia y no me han parecido mal, es este el que es "raro". O a lo mejor es que se repite demasiado. Eso es lo que me pasa con los últimos de Los hijos de la Tierra, que son una pura repetición.

    ResponderEliminar
  4. Tatty: no he intentado leer ninguno de los dos libros que me dices, pero sí que ha habido veces que he tratado de ver una película basada en El conde de Montecristo me he cansado antes del final. Para eso hay tantos libros, para elegir.

    ResponderEliminar
  5. Yo tengo ahora uno en el tintero a medio leer y llevo con él ya no sé cuánto! Se trata de "La danza del cementerio", de Douglas J. Preston y Lincol Child. Es muy raro que lo tenga a medias porque es el último que leo de una saga que me chifla, pero bueno... a veces me pasa!

    ResponderEliminar
  6. Dios mío, a mí me pasó eso con el libro de Angelology... de verdad por la portada y la descripción parecía que iba a ser más interesante, pero no pude más de dos capítulos y ahí sigue xD

    ResponderEliminar
  7. Sandra, a lo mejor es porque son dos autores. A mí me pasó con La clave Gaudí. Había fragmentos de la novela que leía con gusto y otros que se me atragantaban. Tenía todo el rato la sensación de escuchar dos voces narrativas y una de ellas no me motivaba. Abandoné.

    ResponderEliminar
  8. Hope, que rarito llamarte así... Creo que te voy a llamar "mi adolescente favorita". Ya sabes por que, ¿verdad?

    Cuando me dijiste que estabas con ese libro, Angeology, me desconcertó, pero yo a tu edad leía cosas más raras. Hacía mucho que no te preguntaba si lo habías acabado. Ya veo que mi intuición sobre el libro y tú no me engañó mucho.

    ResponderEliminar
  9. Ufff... más veces de lo que quisiera. Y con libros que los demás califican como "míticos". Yo ahí con cara de póker, pensando: "si tú supieras...".

    Pero, bueno, ahí está la gracia, no todos tienen por qué gustarnos. Tenemos criterio para decidir... y ya está.

    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  10. A mí hay libros que me resultan pesados, pero no creo haberlos dejado sin terminar.
    Curiosamente, uno de Moccia apenas conseguí acabarlo... La historia me gustó, pero el estilo no tanto.
    Por ahí también Lev Grossmann me provocó incluso dolor de cabeza...
    Pero bueno, para gustos colores y los libros que nosotros "abandonamos"´, habrá quien los adore...
    Saludos!!

    ResponderEliminar

Si dejas tu comentario, entenderé que aceptas formar parte del reflejo de este espejo. Gracias por tu visita.