domingo, 12 de octubre de 2014

UN AMOR PARA REBECA DE MAYTE UCEDA



Sinopsis:

Rebeca está a punto de casarse cuando emprende un viaje con sus amigas al corazón de Escocia. En medio de un paisaje de subyugante belleza comienza a dudar si Mario, su prometido, es el amor de su vida. Pero ¿cómo saberlo?, ¿cómo darse cuenta de que estamos haciendo la elección correcta? Cuando conoce a Kenzie MacLeod, un joven con el aspecto de haber vivido mil vidas del tamaño de la suya, Rebeca encuentra todas las respuestas.
Tres amigas; tres formas diferentes de entender el amor.

Mis impresiones:

¿Os ha pasado alguna vez que un libro os atraiga desde el primer minuto que lo veis? A mí sí, montones de veces. No siempre tras esa atracción se esconde algo interesante, a veces incluso han sido verdaderos fracasos lectores, pero no es este el caso. No sé decidir por qué, si fue la portada, la sinopsis o porque no esperaba el cambio de género de Mayte F. Uceda, pero en cuanto lo vi supe que quería leerlo. El mismo día que lo puso a la venta en Amazon lo descargué.

Han sido unas horas de lectura maravillosas.

¿Qué vais a encontrar? El arranque está en la sinopsis: tres amigas (Rebeca, Lola y Berta) y un viaje a Escocia, un viaje que no es solo un recorrido turístico más o menos largo (tres semanas) sino un despertar para la protagonista.

Me gusta que los libros me cuenten una historia y me la cuenten bien. Eso es lo que pasa con Un amor para Rebeca. No hace alardes, no se recrea en palabras a las que no afectarían unas tijeras sino que nos va llevando de la mano por el paisaje escocés, por las leyendas del pasado, por un bosque en el que un druida llena de magia una noche… Los personajes hablan como nosotros mismos, aproximándonos al carácter alocado de Lola, a la serenidad de Berta o al debate interno de Rebeca y convirtiéndonos un poco en ellas.

Mayte sitúa la trama en dos escenarios principales: Barcelona, la ciudad de origen de Rebeca, y el pequeño pueblo escocés de Beauly (se pronuncia parecido a beauty), al que describe con tal precisión que acabamos conociendo como si cada día pisáramos sus calles. (Incluso parece que pudiéramos llamar a la puerta de la señora Munro y nos estuviera esperando con una taza de té y una historia que contar sobre los vecinos.) Pero no se queda ahí, de su mano iremos conociendo sitios emblemáticos de Escocia y acontecimientos históricos que quedan perfectamente engazados en la trama. Incluso el reciente referéndum por su independencia tiene un pequeño lugar en la novela.

Rebeca es el centro de esta historia, o más bien las dudas que Kenzie, un atractivo músico escocés cuatro años mayor que ella, despierta en una muchacha que ha sido educada en unos patrones morales tan rígidos que le han planificado la vida hasta el milímetro, impidiendo que sea ella misma. Un viaje a Escocia de fin de carrera con sus mejores amigas, Lola y Berta, le abre los ojos y el corazón. Le enseña que el amor no es un plan sino un accidente, que cuando llega se siente sin poder impedirlo y que es mejor dejarse llevar que arrepentirse toda la vida de aquellas cosas que nunca hicimos por miedo.

Sin embargo… no os cuento más, tendréis que leer….

Mis impresiones acerca de esta novela son excelentes. Lo sé porque cuando siento “este libro me hubiera gustado escribirlo a mí” es que me ha conquistado.

Tengo su anterior novela, Los ángeles de la torre, sepultada entre todas aquellas novelas no leídas que se van quedando en el kindle, eterna pendiente entre una lista larguísima que Un amor para Rebeca se ha saltado, pasándolas a todas.


Sin intermitentes ni nada.