sábado, 3 de mayo de 2025

LAS PRIMERAS PALABRAS DE MI PINTOR

Ayer me cosquilleaban tanto los dedos que no pude evitar ponerle las primeras palabras a la novela de mi pintor.

Sé que no tengo que hacer eso, que debo asegurarme de tener tiempo para dedicarle una continuidad, pero lo necesitaba tanto que empecé.

El archivo está abierto.

La carpeta lista.

El primer capítulo, solo a falta de corrección.

Quiero que sea una novela corta (siempre digo eso y no lo consigo). Ya he hecho todo el trabajo de documentación previa, a falta de los detalles que debo buscar cuando la trama los requiera, tengo un esquema, he decidido los narradores, el principio y el final.

¿Seré capaz?

Yo creo que sí, que de aquí saldrá una novela, pero no sé si saldrá al mundo.

Hace unos días recibí uno de esos bofetones de la vida que me dejaron sin aliento. Por lo general me la pela bastante lo que piense la gente de lo que hago, pero siempre hay personas que te importan. En este caso, en mi casa, me importa. Y me dijeron que si no he entendido ya que no sirvo para esto, que ya debería haber triunfado y lo único que hago es ir de fracaso en fracaso.

Yo no lo percibo así, al contrario, porque mi visión del éxito es una que no implica lo material necesariamente, pero sí es verdad que se me echaron en cara cosas que impiden que me pueda dedicar a esto en cuerpo y alma.

Al menos, de momento.

Así que seguiré escribiendo, crean en mí o no, pero voy a moverme lo justo mientras me lo impidan los que tengo más cerca.