lunes, 9 de enero de 2012

EL ENIGMA DE LOS VENCIDOS. ARMANDO RODERA.

Parece que las navidades ya se han acabado y volvemos todos a poner en marcha la rutina. Yo quiero empezar por el primer libro que he leído este año: El enigma de los vencidos, de Armando Rodera.


El libro me lo proporcionó Armando por dos razones: una, porque es un encanto y es amigo mío y dos, porque soy una pánfila que no era capaz de descargarlo yo sola. Después de mil pruebas con los libros que se ofrecen gratuitos en Amazon (empecé por ellos porque conozco perfectamente mi relación con la tecnología), no aparecía ninguno por ningún lado. Era como si mi ordenador se los hubiera engullido, secuestrándolos para él solito. Así que hablé con Armando y directamente me lo pasó él. Ahora ya he aprendido y me lo pienso comprar, porque me parece la manera más justa de reconocer su trabajo. Sé que he aprendido porque, por arte de magia, el otro día empezaron a aparecer todos los libros que descargué, bien colocaditos en la aplicación que también descargué para poder leerlos. Si hubieran sido tomates creo que hubiera acabado tan pringada como si me hubiera ido de fiesta a Buñol. Lo bueno es que tengo lectura para rato…

Pero vayamos a la novela.

Sinopsis:

El enigma de los vencidos cuenta la historia de David Sanroman, un joven madrileño que por circunstancias se ve obligado a emigrar a Sudamérica. Cuando regresa, mediada la década de los ochenta, se hace cargo de una tienda de antigüedades que ha heredado en Madrid. En un sótano oculto en el negocio, descubre una maqueta sorprendente, un extraño juego de mesa que le llevará a resolver, al lado de dos adolescentes, Rubén y Samuel, y su amigo Pedro, el enigma de los vencidos.

Mi opinión:

Empecé a leer El enigma de los vencidos y enseguida me vi envuelta en la historia que cuenta Armando. Al principio no me di mucha cuenta de por qué, pero al cabo de un tiempo de lectura empecé a ser consciente de la razón: Armando elige, para esta novela, la primera persona. Es el propio David quien nos va contando su aventura, aproximándola al lector de manera que le hace partícipe de algún modo de la trama. Me gustan las historias contadas en primera persona, novelas en las que como lector te implicas desde la primera página.

La novela está dividida en doce capítulos, cada uno de ellos con su título independiente, que de alguna manera anticipan el argumento. Empieza alternando dos momentos temporales: el presente de David y su regreso a Madrid, para después llevarnos al pasado, para explicar las razones que le han conducido hasta donde está ahora. Vuelve de nuevo al presente literario (mediados de los ochenta) y ese es en el momento en el que hace su aparición la fabulosa maqueta de Madrid y los enigmas que han de ir resolviendo. Entonces la novela adquiere un ritmo trepidante, impidiéndote dejarla. Los enigmas se van sucediendo y en algunos de ellos me ha sorprendido la imaginación que ha puesto Armando. El poema con las letras descolocadas me dejó a mí descolocada también. Sólo fui capaz de imaginar la resolución de un enigma y medio. Y también la resolución fue a medias: lo había leído en otra parte.

Los protagonistas de la novela, como se puede ver en la sinopsis, son David Sanromán, su amigo Pedro, periodista de profesión, y dos adolescentes: Rubén y Samuel, este último muy importante por su participación en la otra trama de la novela, la historia de amor frustrada entre Elena Fournier y David. Con respecto a esto, debo decir que he echado un poco de menos que hubiera más presencia femenina en la novela. Elena aparece en poco más de un capítulo, aunque su presencia es patente en toda la novela, en los recuerdos de David, y Sara, una sevillana que les ayuda a resolver alguno de los enigmas.

El escenario principal de este libro es Madrid, más concretamente el Madrid de los Austrias aunque hay otras ciudades españolas que también aparecen como Bilbao, Santander, Sevilla o San Sebastián. El exilio de Sanromán le lleva a Brasil, y Armando aprovecha para descubrirnos paisajes espectaculares del país sudamericano. No sé si los conoce de primera mano pero la sensación que da tras leer sus descripciones es que los ha vivido.

Mi recomendación: que no os la perdáis. Hace pasar muy buen rato, transmite muy buenas sensaciones y es una novela que engancha. Encima, cuando se termina, a mí por lo menos me ha dejado muy buen sabor de boca. Me ha gustado mucho, la verdad.

Una cosa más, antes de que se me olvide, la imagen de la portada es de Miguel Ángel López y en ella se encuentran elementos claves de la novela.

¿Te animas a descubrir los enigmas que esconde este libro? Lo tienes en Amazon a un precio irresistible. Así que, no esperes, consigue El enigma de los vencidos ahora mismo.