viernes, 22 de marzo de 2013

CUMPLEAÑOS PREGUNTÓN


En este post, pido comentarios.

Ya sé que es un comienzo raro, sobre todo porque la primera idea cuando me he puesto a escribir ha sido contaros que mañana, 23 de marzo, El espejo de la entrada cumple 5 años en la red. Lo celebraré comiéndome un pastelito y soplando una vela perfumada delante de un espejo. Una ceremonia sencilla para conmemorar una aventura de la que no me arrepiento en absoluto.

Mi regalo de cumpleaños bloguero quiero que sea vuestro comentario, pero no un "felicidades" sino la respuesta a una pregunta que os lanzo.

¿Cuál es el límite que estáis dispuestos a pagar por un libro digital?

En Amazon, el programa de publicación te permite poner el libro a un precio mínimo de 0,89€ y a partir de ahí eres tú mismo quien va decidiendo. Es lo que yo he hecho en este año que llevo desde que el 18 de marzo de 2011 publiqué ahí El medallón de la magia.

Probar.

He subido los precios, los he bajado, he puesto diferentes dependiendo de si era una u otra plataforma. Y no sólo eso, he observado lo que ocurría con otros libros, de otros autores…

Pero me acabo de dar cuenta de que no he hecho una cosa básica: preguntar a quienes realmente tienen algo que decir, los lectores.

La piratería es un hecho, está ahí. Sin ir más lejos, cada vez que abro el blog y miro la manera por la que se entra a él, encuentro que una de las que más se repiten es "descargar gratis… " y cualquiera de los títulos de mis libros. Ante algo así no hay quien pelee y, a pesar de todo, las ventas son posibles a través de Amazon pero supongo que porque el precio es más que competitivo, irrisorio.

La única manera que se me ocurre de luchar contra lo imposible.

Por eso me atrevo a pediros, como lectores sensatos que sois, que respondáis a mi pregunta.

¡Os espero impaciente!

miércoles, 20 de marzo de 2013

LA TUMBA COMPARTIDA DE ANTONIA ROMERO



Sinopsis:

Maite, una joven anticuaria que viene acarreando cierto sentimiento de culpa desde la desaparición en el pasado de un miembro de su familia, va a ver su rutina alterada. Un día llega a su tienda, que dirige con su socio Adrián, un extraño amuleto corazón egipcio, de la época del faraón Akhenatón.

Maite, Adrián y el conocido arqueólogo Mauricio Varona, además del equipo de éste, inician una expedición a Egipto en busca de la tumba de la reina Nefertiti, esposa del faraón. Pero todo se complica con muertes inesperadas, hallazgos de cadáveres, desconfianzas, envenenamientos, identidades desconocidas, que el lector va descubriendo y destapando de la mano de Maite.


Mi opinión:

Éste fue mi primer regalo de este último cumpleaños, que me entregaron unos días antes porque soy una impaciente. Llevaba tiempo deseando leer el libro de Antonia Romero porque ya había tenido el placer de leerla antes. Empecé a conocer su trabajo a través de otra de sus novelas, Peso cero, que me llamó más la atención al principio y que no me decepcionó en absoluto. Tienes su reseña aquí, por si quieres echar un vistazo. Fue uno de los libros que más disfruté este verano.

La Tumba compartida narra la historia de Maite, una anticuaria que de pronto ve su vida envuelta en un doble dilema. Por un lado, un programa de televisión le ha devuelto a su hermano, perdido hace mucho tiempo, y por otro, la llegada de un amuleto a su tienda de antigüedades, que parece más una imitación que algo auténtico, y que desencadena una expedición a Egipto, para tratar de encontrar la tumba de Nefertiti. A partir de ahí su vida sufre un vuelco, se ve envuelta en muertes inesperadas, traiciones, secretos guardados durante años…

El libro está estructurado en dieciocho capítulos, un epílogo y unas páginas finales que rematan la historia de una forma deliciosa. Cada uno de los capítulos comienza con un fragmento de textos de las pirámides y en ellos, Antonia, hábilmente, va entrelazando la aventura arqueológica con los sentimientos de Maite. Los cambios de giro en la historia, sobre todo en la última parte, son constantes, dejando al lector desconcertado en muchas ocasiones, sin saber muy bien a quién atribuirle el papel del "malo".

El mosaico de personajes que nos muestra el narrador en tercera persona es amplio. Conocemos así a Víctor, el hermano perdido de Maite, un hombre normal, con una vida tranquila y estable a quien de pronto todo se le pone patas arriba cuando su hijo Marc, que está viendo la televisión, le cuenta que cree que es él la persona a la que buscan en el programa. Marc es otro personaje que me ha gustado mucho, un chico apasionado con Egipto que a lo largo de la historia tendrá su importancia. Sin pretenderlo sirve de nexo de unión entre la anticuaria y el arqueólogo Mauricio Varona, un personaje que durante el relato fui incapaz de saber si me caía bien o mal. Supongo que ahí está parte de su encanto, de hecho, todos los personajes están muy bien construidos.

La relación de Maite con su socio, Adrián, finiquitada desde hace tiempo para ella al comenzar la novela, y la presencia en su vida de Mauricio, establece un triángulo entre los personajes, apasionados de la arqueología. Los datos que aporta Antonia sobre el antiguo Egipto son amplios y quienes sienten interés por las primeras civilizaciones de la Historia, seguro que los disfrutarán.

Me ha gustado mucho Helena, la madrastra de Víctor, y cómo Antonia ha sido capaz de unir perfectamente dos historias tan aparentemente dispares como la búsqueda de la tumba de Nefertiti con la historia actual del hermano encontrado. En realidad podrían considerarse dos caras de lo mismo, búsquedas del pasado para entender por qué las cosas sucedieron de un modo u otro.

Os animo a que le deis una oportunidad. Además, ya no hay excusa posible. Existe en formato digital pero también podéis, como he hecho yo, leerlo en papel. Desde febrero está disponible en tapa blanda, en Ediciones B.




martes, 19 de marzo de 2013

¿POR QUÉ HACES ESTO?

Me lo he preguntado mil veces, ¿por qué te metiste en este lío? Me he respondido que me aburría, que un día abrí el explorador de internet, di vueltas erráticas y tropecé con una página donde podía crear un blog y lo hice para ver qué era.

No entendía nada.

Tan poco, que hubo un tiempo en el que no supe volver a ella, en el que pasaron meses sin visitar mi propio espacio porque como le puse este nombre tan peculiar, cada vez que lo buscaba, Google me llevaba a IKEA...

Un día me llegó un mensaje de alguien desde el otro lado del océano y recuperé mi enlace. Vi que el blog tenía actividad al margen de mí misma, seguidores insospechados que sí encontraron el modo de ver lo que había puesto. Iban creciendo y, cada domingo, el único día que me conectaba, encontraba respuesta en los comentarios a mis reflexiones en voz alta. Me animó a seguir.

Fue extraño, divertido. Una manera nueva de interactuar que era desconocida para mí hasta entonces.

Me atreví a hablar de mis libros, comenté los de otros y poco a poco este proyecto repentino empezó a tomar cuerpo.

No pensaba en darle continuidad hasta que me convencieron de que la amistad era posible a través de la pantalla, que lo que era una simple ventana en la que insertar contenidos también era un espacio de intercambio de emociones.

Creo que seguí más por eso que por nada, porque cuando abría el espejo encontraba el reflejo de personas reales que me regalaban cinco minutos de su tiempo para decirme, aunque las palabras escritas fueran otras, hola, estoy aquí.

Los tiempos cambian, las cosas mutan y los reflejos de este espejo no son los mismos. Han llegado otros y los primeros se han marchado.

Y a mí me da mucho coraje echarlos tanto de menos.

Será que los cambios me cuestan demasiado, que me da miedo no estar a la altura, que me exijo demasiado. Hoy tenía que escribir una reseña pero no tengo ganas.

Ya lo haré...

domingo, 17 de marzo de 2013

FRASE







Cada lágrima enseña a los mortales una verdad.

Platón (427 a.C.-347 a.C.) Filósofo griego.

miércoles, 13 de marzo de 2013

DETRÁS DEL CRISTAL CASI UN MES DESPUÉS

Hace casi un mes que publiqué en Amazon Detrás del cristal. Concretamente, el día 15, hará ya cuatro semanas que el libro está a la venta. Si me hubieran jurado que pasaría lo que está sucediendo hubiera acusado a la persona de un exceso de imaginación: desde el primer día se montó en el top 100, empleó una semana en ir escalando posiciones hasta subirse a la lista de los diez primeros y allí sigue, ahora, mientras escribo, en el número tres, justo detrás de las novelas de Fernando Gamboa González, a quien siempre le digo que el día que le pase me pondré muy tontorrona. Es normal, es un crack, sus novelas gustan y mucho y pasarle, como me dice él, sin intermitentes, es un reto tonto, de esos que te pones en la vida por puro afán de superarte.



Reviso mi muro de Facebook y me doy cuenta de que lo estoy llenando de cifras, de rankings, de posiciones, de comentarios de los que voy recibiendo, de reseñas... convirtiéndolo en algo monotemático y quizá aburrido, pero es que detrás de cada captura de pantalla, de cada una de las fotos, de las posiciones... hay emociones.

Las mías.

Intento dejarme a mí misma constancia de lo que me está pasando pero a la vez me obligo a frenar mi entusiasmo porque os aseguro de que es mucho más intenso de lo que dejo escapar. Detrás de cada una de esas publicaciones hay a veces lágrimas emocionadas, cada vez que miro la posición de la novela no soy inmune a las pequeñas variaciones. Cada vez que alguien hace un comentario, le da a un me gusta, me envía un mensaje de ánimo o elude pronunciarse en público hay sentimientos que algunos días me desbordan. Lo he dicho más de una vez, me siento como una olla express sin válvula.

Por si esto fuera poco, empiezan a llegar reseñas del libro. La primera fue Violante Martín, quien contó sus impresiones del libro. Me encanta esta reseña, sobre todo al final, cuando nos cuenta que para no dejar de leer... ¡se llevó el portátil a la peluquería!

Reseña en el Blog El mundo y yo.

Pilar Muñoz Álamo, escritora, autora del libro de relatos Ellas también viven (por cierto, tenéis que leerlo) me regaló una reseña muy especial. Si algo tiene Detrás del cristal, como dificultad para reseñarlo, es que no se puede hacer fácilmente sin destripar la trama. Me costó muchísimo escribir la sinopsis para contar sin contar, y Pilar, con esa capacidad que tiene para expresarse, supo esquivar esa dificultad, haciendo una lectura profunda de la novela, no quedándose en la apariencia de una historia disparatada.

Reseña en el blog Ellas también viven.


Ayer llegó la tercera reseña de la novela. Otro escritor, Félix Jaime Cortés, autor de El hombre de Grafeneck, (que también os recomendé en el blog este verano), puso mis emociones a prueba del todo. Igual que Pilar supo encontrar las palabras para contar sin desvelar, supo arañar en el fondo de lo que quería contaros a través de unos personajes en apariencia sencillos. Leedlo, yo no sé todavía qué decirle.

Reseña en el Blog Impresiones de un acompañante.

No se queda ahí, están los comentarios en Amazon, algunos de personas a las que no conozco de nada, otros de gente a la que he recuperado en mi vida a través de los libros...

Son tantas cosas.

Estoy esperando algo negativo, estadísticamente tiene que llegar, pero mientras, disfruto a mi manera y me lo cuento aquí, mirándome en mi espejo. Desde Detrás del cristal...