Sinopsis:
Laura es la reina de los «¿Y si...?», y ahora está a punto de casarse. Pero, ¿y si Sergio no fuera el hombre de su vida?
Sus dudas no hacen más que aumentar cuando conoce a Leo, un encantador y sexy policía que la hará enfrentarse de una vez por todas a su enfermiza indecisión. Ambos se irán descubriendo el uno al otro y tendrán que luchar contra el deseo irrefrenable que los sacude cada vez que están juntos.
La mayoría de las veces, cabeza y corazón no van de la mano, y Laura no tiene ni idea de a qué parte de ella debería hacer caso.
Mis impresiones:
Esta novela me la compré el día en el que estaba en promoción con kindle flash. No sabía nada de ella, no tenía ninguna referencia y apenas le eché un somero vistazo, pero me apeteció y la compré. Luego hice eso que digo siempre que no tengo que hacer y que no volveré a hacer, pero que no puedo resistir: empezarla sin acabar el libro anterior.
Pues me la tuve que leer...
Esta historia está escrita en un tono desenfadado, desde el punto de vista de Laura, la protagonista. Si bien es una novela fácil de seguir, en ella hay algunas frases que me han gustado mucho y que he ido tuiteando, porque he descubierto la manera de compartir los subrayados de kindle en Twitter. Si veis en mi perfil una frase seguida de un enlace, eso es que estoy leyendo una novela y alguna de sus frases me ha dicho algo -a veces incluso es algo que no está en el contexto de la historia sino que me lleva a un pensamiento mío- y he sentido el impulso de dejarla ahí.
Laura está a punto de casarse con Sergio, el chico con el que lleva tres años embarcada en una relación que nunca ha sido explosiva, y mucho menos desde que pasaron el primer año, ese en el que hablan las hormonas y las reacciones químicas en nuestro organismo. A poco de la boda, Laura empieza a tener millones de dudas, su cabeza se llena de "¿Y si...?", la coletilla que le pone a todas sus preguntas internas. En ello está cuando Leo irrumpe en su vida.
Leo es... perfecto. Agente de la autoridad, guapo, simpático, de sonrisa encantadora, amable, generoso, correcto, educado, cachas... vamos, un chico de esos que solo existen en nuestros mejores sueños. Tropieza con Laura un día para ponerle una multa cuando tiene un poco mal aparcado a Cooper. (Cooper es el coche de Laura, que tiene nombre). En primer encontronazo entre ellos está listo y la química entre los personajes no se hace esperar. Solo será la primera vez porque, días después, Candela, la hermana de Laura, planea unos días en un pueblo de Burgos, en casa de un amigo, y ese resulta ser Leo.
Y no, no es una casualidad que acaben en su casa, pero tendréis que descubrir vosotros cuál es la razón leyendo el libro.
Lo que más me ha gustado de la novela no es que Leo sea perfecto. Lo que más me ha gustado es que la autora sabe crear ese clima mágico de sincronía entre la pareja protagonista, que maneja la tensión sexual perfectamente y que nunca pierde la elegancia en las descripciones de cualquier encuentro entre los dos. No hay escenas de sexo, por lo menos de las que suelen aparecer en la literatura de ahora, y hay más química entre los personajes que en muchos libros eróticos. Y eso me ha gustado porque eso sí es real, si se da en la vida. A veces, si tenemos suerte, tropezamos con alguien que hace que nuestro corazón se descontrole, que se nos aflojen las piernas y digamos tonterías para encubrir nuestro nerviosismo. A veces, con infinita suerte, nos enamoramos a la vez que otra persona lo hace de nosotros y entonces todo merece la pena.
La novela no se centra en una trama compleja sino más bien en las dudas de Laura y el nacimiento de los sentimientos hacia Leo. Un detalle interesante, para mí, ha sido la teoría de los primeros besos que él le expone. Me ha parecido muy acertada y muy tierna, además de que creo que lleva mucha razón.
¿Qué teoría?
Leed...
Creo que ¿Y si de verdad te quiero? es una novela que se lee con gusto, que hace que muchas veces te rías con las cosas que le pasan a Laura, que me ha enseñado un lugar que desconocía, y del que he buscado fotos porque me parecía que tenía que ser precioso. Y sí... lo es. Y como no me pilla muy lejos de casa, quizá planee una excursión no tardando.
Pozo Azul. Covanera. Burgos |