¿Cuál es la finalidad de una obra literaria? Si la
entendemos como arte, está hecha para que quienes se acerquen a ella disfruten.
Placer estético, deleitarse entre palabras a las que el autor dispone de manera
especial, para que provoquen al lector.
Emociones.
Sentimientos.
Otras veces no se va tan lejos, simplemente se busca contar
una historia que ayude al lector a escapar de su realidad durante el tiempo en
el que está sumergido en la historia.
Evasión.
Vivir de algún modo lo que nunca se viviría de otro.
Cuando, además de entretener y conmover, la obra literaria
busca otros fines aparece la literatura comprometida, esa que busca sacudir
conciencias dormidas y ponernos frente a la realidad el mundo que nos rodea.
Historia.
Presente.
Futuro.
Y, al final de esta lista, también es una catarsis, un
sentimiento de liberación o serenidad. Un reflejo de lo que sentimos y, por qué
no, también de lo que siente el autor.
Es otra forma de entender el mundo.
Es una forma más de vida.