Falta poco más de un mes para la publicación en papel de Detrás del cristal, bajo el sello Vergara (Ediciones B) y ya os puedo decir que ha dado un paso en este formato: minúsculo, pero un paso.
¡Ya está en el boletín de novedades de febrero!
Si tenéis mucha curiosidad podéis pinchar aquí y podréis no sólo verla a ella, sino a todo el resto de libros que saldrán en febrero. No está muy lejos, página 15.
Hoy, día de Reyes, tengo mariposillas en el estómago, mucha ilusión por lo que se aproxima y empiezo a ser consciente del todo de que ese sueño se materializa. Pronto podré verlo, incluso tocarlo, sentir su tacto, su aroma, escuchar el sonido de las páginas cuando las pase. Degustarlo, de algún modo (aunque no pienso chuparlo que la tinta es tóxica).
Hoy también, tras casi 50 días seguidos, se ha bajado del top de Fnac. Ha sido increíble verlo ahí día tras día porque no esperaba que entrase en él y mucho menos que fuera capaz de sostenerse tanto tiempo. Entre uno y otro, Amazon y Fnac, han sido más de 200 días en los que la motivación se multiplicaba (este trabajo de escritor publicista es agotador, sin alicientes es directamente, inoportuno para la salud). Se tomó un respiro de cuatro meses desde el verano para que yo también descansar y terminara ATCLV sin distracciones. Ahora parece que hará lo mismo, para que me pueda concentrar en esta otra versión que ya está prácticamente aquí.
Confío en ella, en que sabrá encontrar la manera de llegar a los lectores, como lleva haciendo desde hace casi un año. Piruetas del destino, el libro digital se publicó el 15 de febrero y el de papel llegará el día 12.
No sé cuántos ejemplares tiene la edición exactamente (aún me tienen que pasar el dato correcto y no quiero equivocarme con la cifra) pero lo que sí sé es que hay menos puntos de venta en España que ejemplares disponibles, así que si tenéis mucho interés es conseguirla, os recomiendo que la encarguéis en vuestra librería, sobre todo si como yo vivís en un sitio pequeño. Seguro que así la tendréis con vosotros en cuanto salga.
Y si hacéis que se agote la edición, no os cuento lo contenta que me pondré.
Incluso hasta puede que mis baterías se recarguen a tope y sea capaz de escribir otra novela más.
¡Felices Reyes y que os traigan muchas cosas!