Del éxito de la empresa, mejor hablaremos en otro momento...
Podría decir que sé exactamente el día que nos conocimos, pero no es verdad. Ya le había visto en las redes, pero cuando fui consciente de Roberto Martínez Guzmán fue en el momento en el que él estaba buscando blogs que quisieran participar en una lectura conjunta de su primer libro. Como todo autor que empieza, trataba de abrirse camino y chequeó los blogs que en ese momento existían. No eran tantos como ahora, solo éramos unos pocos los osados que nos habíamos atrevido en aquellos momentos con blogs literarios, así que acabó tropezando con El espejo de la entrada. Me escribió con toda la amabilidad del mundo, ofreciéndome incluso su novela en papel y yo le dije que no me interesaba.
No sé si fui muy amable, la verdad, pero es que me pilló en un día terrible.
Supongo que la máxima de la ficción, esa que dice que las buenas historias tienen principios sorprendentes, nosotros la cumplimos a la perfección. Pero la historia siguió y, desde entonces, nuestro camino no ha dejado de ir en paralelo.
BIOGRAFÍA LITERARIA
Ourense, 1969.
Hijo de una familia trabajadora, Roberto Martínez Guzmán ha
pasado prácticamente toda su vida en la ciudad que lo vio nacer, salvo el
tiempo que estudió Derecho en la Universidad de Santiago de Compostela y
algunas etapas cortas en las que, por motivos de trabajo, residió en otras
ciudades. Alguno de esos trabajos tempranos en los que desempeñó su actividad
estaban vinculados con el sector editorial. En la actualidad es funcionario de
la Xunta de Galicia, aunque no descarta dedicarse de lleno a la literatura en
los próximos años.
SUS NOVELAS
Su carrera literaria comenzó con la publicación de Cartas desde el maltrato (2010), un
original libro de no ficción en el que una víctima de malos tratos, que aparece
protegida bajo el nombre ficticio de Montse, cuenta en primera persona su
experiencia. Roberto, autor solo de la parte que enlaza las cartas reales que
forman este libro, se sitúa como espectador y deja que sea ella quien exponga
ese tiempo difícil. Es uno de los primeros ensayos publicados sobre un tema tan
delicado y el primero en el que una víctima lo narra en primera persona.
El libro fue originalmente publicado por una editorial. En
este sentido, Roberto presenta un perfil también un poco diferente al resto de
los autores de los que hablaré, como le pasaba a Víctor Fernández Correas. Él
toma el camino tradicional, la edición clásica, pero solo dos años después, cuando se presente la oportunidad en España, probará suerte en Amazon.
Será en ese momento cuando investigue las posibilidades que ofrece
la autoedición, el hecho de controlar una obra literaria en toda su extensión,
y decida subir a la plataforma su primera novela, Muerte sin resurrección (Eva Santiago 1, 2012). Roberto es un
hombre que no tiene miedo a apostar por las cosas en las que cree y decide hacer
algo que a mí, personalmente, me sorprendió mucho en ese momento: vender el
ebook tres veces más caro de lo que lo estaba haciendo la mayoría de autores. Lo que
podría haber sido un despropósito (lo fue para otros autores que lo intentaron
en ese momento y fracasaron), en él acaba funcionando porque tiene una historia
potente entre las manos. Muerte sin
resurrección, una novela cargada de intriga, pronto alcanza los primeros
puestos de ventas de Amazon, no solo en España sino también en mercados con el
mexicano o en otras plataformas europeas.
A día de hoy, está aún entre las más vendidas.
A día de hoy, está aún entre las más vendidas.
AUTOR HÍBRIDO
Como dije al principio, Roberto procede de la edición
tradicional. Tras una experiencia no demasiado satisfactoria, es muy cauto a la
hora de escuchar las propuestas que le van llegando desde distintas editoriales
españolas de primer orden. Estudia minuciosamente lo que le ofrecen para, al
final, tomar la decisión que a él más le convence. Casi siempre ha ganado
seguir manejando sus libros, pero hay un momento en el que se arriesga con algo
diferente.
Café y cigarrillos para
un funeral (Eva Santiago 2, Serial Books, 2015) lo publica bajo este sello.
Se trató de un experimento en el que cada semana se publicaba un fragmento de
lo que al final constituyó esta segunda entrega de la inspectora Santiago. Al
terminar, se decidió publicar a costo cero en las principales plataformas y ha
sido la puerta de entrada de muchos lectores a su narrativa. La originalidad,
tanto del planteamiento como de la resolución de este relato, el manejo de la
intriga por parte del autor, hace que los lectores quieran repetir. Tuve el
privilegio de firmar el prólogo que acompaña al relato.
Con su tercera novela, Siete
libros para Eva (2016), elige participar en la III edición del concurso
indie de Amazon. Las buenas críticas no se hacen esperar y, aunque no recibe
premio alguno, para los lectores que lo han ido conociendo con las novelas
anteriores se asienta de manera definitiva como un autor que no solo maneja la
intriga en las novelas, sino que sabe dotarlas de ritmo y finales siempre
inesperados. Siete libros para Eva,
además de tratar una desaparición, mezcla temas como la corrupción política
local, las relaciones de familia, los secretos… convirtiéndose en una novela
muy completa y redonda, narrada además con agilidad.
Esta novela fue número 1 de ventas en Google Play en 2017 y el día del libro de este mismo año fue la más recomendada en Twitter según el estudio realizado por el Instituto de Ingeniería del Conocimiento (ICC) de la Universidad Autónoma de Madrid. En este 2019 ha pasado casi todo el año entre las más vendidas en Amazon.
Esta novela fue número 1 de ventas en Google Play en 2017 y el día del libro de este mismo año fue la más recomendada en Twitter según el estudio realizado por el Instituto de Ingeniería del Conocimiento (ICC) de la Universidad Autónoma de Madrid. En este 2019 ha pasado casi todo el año entre las más vendidas en Amazon.
Su obra, La
suerte de los idiotas (2019) abre la puerta a una saga protagonizada por
Lucas Acevedo, un policía en excedencia que vuelve a su Galicia natal y cuyo
carácter le hará, al menos en esta primera entrega, complicarse la vida casi
nada más llegar. Esta novela, mucho más negra que las anteriores, es un
homenaje a la novela policíaca clásica, está plagada de elementos reconocibles
para los amantes del género y cuenta además con una potente banda sonora.
Como no, también está entre las más vendidas desde que se publicó hace unos meses.
Como no, también está entre las más vendidas desde que se publicó hace unos meses.
Ha publicado dos novelas más con Lucas como protagonista que también son éxito de ventas: La envidia de los mediocres y El ego de los tontos.
También este mismo año colabora en la Antología solidaria Un 4 de febrero, cuyos beneficios se
donan a la Fundación Aladina. Personalmente, su relato, El último vozka, me parece uno de los más redondos de los que
forman estos cuentos.
UN EJEMPLO DE CONSTANCIA
Roberto Martínez Guzmán es un ejemplo de constancia y manejo
en las redes sociales. Dedica a ellas un tiempo todos los días y cuida de que
sus novelas siempre estén visibles. Sabe que los lectores, en estos tiempos en
los que prima la rapidez, también olvidan a la misma velocidad y por eso no le
importa repetir hasta la saciedad sus promociones. Puede que existan lectores a
quienes esto les moleste, pero frente a ellos hay un batallón que los ignora y
otros muchos que acaban viéndolos por primera vez y comprando sus libros.
No es de extrañar que prácticamente todas sus novelas hayan
sido número uno en Amazon, y no solo en España, y se mantengan durante meses
entre las cien más vendidas de la plataforma, llegando a estar tres de ellas de
manera simultánea en el ranking. Hasta ahora no se ha dedicado plenamente a la
escritura, pero si hay uno de nosotros que quizá sería capaz de ganarse muy
bien la vida solo escribiendo sería él.
SU ESTILO
Para mí, la palabra que lo define es limpio. Huye de las
florituras literarias, construye frases claras en las que otorga al lector la
parte de información que él quiere que en ese momento maneje para seguir
conservando esa intriga que necesita en sus historias. No quiere esto decir que
escriba de manera simple, de ningún modo, si hay otra cosa que destaca en su
narrativa son las frases que se pueden extraer de sus novelas, muchas de las
cuales usa en las promociones de los libros y que la red ha propagado.
En esas reflexiones certeras aprovecha para
hacer crítica social, para pararse a pensar sobre nuestro mundo. Aunque las suyas parezcan,
en principio, novelas de evasión, no lo son del todo. Analiza el comportamiento humano en momentos extremos y sus reacciones. Escribe de nuestro presente, de problemas como el maltrato o la corrupción política y sabe cómo llegar hasta el lector.
En la próxima entrega de esta serie de entradas conoceremos a una mujer. ¿Me seguís acompañando?
En la próxima entrega de esta serie de entradas conoceremos a una mujer. ¿Me seguís acompañando?