Este libro es muy especial para mí, porque he ido conociendo detalles del proceso que ha llevado a su publicación, de manos de su mismo autor. Este mundo virtual es muy curioso, y pasan cosas impensables en el mundo real. Estoy segura de que podríamos habernos cruzado en una calle de Madrid sin habernos visto, pero un pequeño comentario, añadido al final de una de mis entradas, le hizo fijarse en mi blog. Hablaba de una página web que había encontrado, en uno de mis paseos erráticos por internet, que hablaba de un libro: El enigma de los vencidos, la primera novela de Armando. En la web había dejado retazos de la novela para que pudieran ser leídos por quienes cumplieran una condición: resolver pequeños enigmas que daban las claves de acceso a esos fragmentos de lectura. Lo conté porque me pareció genial y mi sorpresa fue mayúscula cuando encontré un comentario hecho por él mismo en el blog. A partir de ahí hemos hablado (mejor dicho, nos hemos leído) a través de correos, redes sociales y nuestros respectivos blogs. Poco a poco he ido descubriendo a alguien con mucho entusiasmo y que ha conseguido culminar uno de sus sueños: poner personalmente una de sus obras en el mercado literario, sumándose a la nueva tendencia que ha puesto en nuestras manos la red y de paso siendo sus de los pioneros. La lectura de su blog Aventuras y desventuras de un escritor novel me hizo intuir que alguien que era capaz de engancharte con una bitácora, podría estar escondiendo un novelista. Y no me equivoqué.
Meses después de nuestra primera "charla" me llegó la noticia de la publicación en ebook de la novela, y su imparable ascenso en las listas de Amazon. Quise comprarla enseguida, pero el pasado mes de julio para mí fue caótico en lo personal, y siempre pasaba algo que retrasaba mi propósito. No es común para mí aparecer en los agradecimientos de un libro, así que había algo más que interés literario en esta obra y quise conseguirla a toda costa. Finalmente, hace unos días, solucioné las dificultades técnicas, la descargué y me puse con su lectura.
El color de la maldad pertenece al género de novela negra y narra la investigación que llevan a cabo un inspector de policía, Paco Bermejo, y un guardia civil, Pablo Roncero, de manera conjunta, para atrapar a un asesino en serie que está cometiendo crímenes brutales a lo largo de la geografía española. La historia arranca con la desaparición de Laura y Ramiro, una joven pareja que pasaba un fin de semana romántico en la provincia de Ávila. Para investigar discretamente las circunstancias que rodean el caso son enviados el inspector Bermejo y el sargento Roncero, pero no serán los únicos: una periodista, Miriam Monfort, antigua compañera de estudios de Roncero, sigue las pistas de la noticia. Nada más empezar ambos policías se dan cuenta de que se enfrentan a alguien muy peligroso: la brutalidad de los asesinatos y la escenificación extraña en la que aparecen los cadáveres les dice que aquello no será un caso más. Miriam, por su parte, intuye que esa puede ser la noticia de su vida.
El color de la maldad me ha sorprendido. La trama de la novela es impecable, no deja cabos sueltos y la forma de organizarla, poniendo sobre aviso al lector al comienzo de cada capítulo sobre el lugar en el que nos encontramos en cada momento, agiliza la lectura e impide que te pierdas. En su afán de verosimilitud, Armando Rodera ha elaborado un buen trabajo de documentación, tanto de ambientes como de personajes. Estos están bien perfilados, sobre todo el de Jasón, el asesino, de quien nos cuenta, no sólo lo que hace, sino sus motivaciones, las situaciones que ha vivido y que le han ido conduciendo a su demencia. El policía, Bermejo, es el mayor de la pareja, un tipo peculiar cuya vida personal es un desastre. Me parece acertada la manera que ha elegido para que le escuchemos, un lenguaje muy llano, sin artificios. Pablo Roncero es el más joven. Realiza su trabajo con una eficiencia, pero en lo personal, sobre todo en lo que se refiere a Miriam, aparecen todas sus inseguridades.
La novela, como ya he dicho, tiene su argumento bien estructurado, resulta muy inteligente la manera que ha tenido de resolverla y además se guarda alguna que otra sorpresa para el desenlace. He observado, además, como el tratamiento del lenguaje va madurando a medida que avanzamos en la lectura, las descripciones están más elaboradas y la intuición de que estás llegando a entenderlo todo te empuja a seguir leyendo sin parar hasta su final.
La novela se puede descargar desde la página del autor, Armando Rodera, y tiene un precio muy atractivo, 2,99 euros. Vamos, lo que cuesta tomarte una cerveza y un pincho, así que no hay demasiadas excusas para retrasar su compra y adentrarse en esta historia que seguro que os va a seducir. Está publicada en varios formatos: pdf, epub, ... y se puede leer tanto en el ordenador, en un libro electrónico o en incluso en una tablet. El hecho de que esté disponible de este modo hace que salve el obstáculo de las fronteras, así que quienes estáis al otro lado del mundo y conocéis esta lengua maravillosa que es el español, también podéis acceder a ella.
Tatty, de El universo de los libros, dijo de El color de la maldad, en la reseña que publicó hace algunas semanas, que bien podría convertirse en una película y creo que estoy muy de acuerdo con ella. Es muy cinematográfica. Y con la cantidad de cosas que pasan podría convertirse hasta en una serie.
Armando ya está embarcado en otros proyectos literarios pero mientras los concluye podemos disfrutar de esta novela que ya está aquí. ¿Os animáis con ella?