Algo que se queda desguarnecido se vuelve vulnerable, está desprotegido y desamparado, sin las medidas necesarias para su seguridad o mantenimiento. Por ejemplo, un lugar puede quedar desguarnecido si no tiene vigilancia o defensas suficientes, y una persona puede sentirse desguarnecida si no cuenta con el apoyo o recursos necesarios en una situación determinada.
Este verbo se puede descomponer morfológicamente de la siguiente manera:
Prefijo: des-, que indica negación, privación o inversión del significado original de la palabra base.
Raíz: guarn-, que proviene del verbo guarnecer, cuya raíz es guarn-, relacionada con la idea de protección o defensa.
Sufijo: -ecer, que indica la acción de realizar lo que la raíz indica, en este caso, hacer o proveer.
Y también se puede sufrir.
Uno puede sentirse desguarnecido cuando pierde el amor o la
amistad, y sentir que el mundo es aún más hostil y desolador.